Sitios de interés
, la capital de Portugal, es un Destino de Playa que se puede visitar tanto en verano como en invierno, vamos a montarnos al tren dispuestos a acompañar el estuario del Río Tajo y hacer un entretenido paseo por el centro de la ciudad conociendo el elevador de Santa Justa, la Iglesia Convento do Carmo, la Plaza del Comercio, la Plaza de los Restauradores y la Plaza del Rossio en La Baixa; el Castillo de San Jorge, la Iglesia de San Vicente de Fora, la Iglesia de Santa Engracia y la Catedral de Santa María Maior en La Alfama; el Monumento a los Descubrimientos, la Torre de Belem, el Palacio de Belem y el Puente 25 de Abril en el Barrio de Belem; el Palacio de Sao Bento y la Basílica da Estrela en el Barrio Alto y el Parque de las Naciones y su coqueto centro comercial.
Pero también podemos observar a Lisboa desde otro ángulo haciendo un paseo que seguramente nos volverá a sorprender con playas que se suceden muy cerca de la Capital de Portugal.
Estoril y Cascais vuelven a parecer un paisaje nuevo nunca visto, con maravillosos escenarios de arena y roca en un marco perfecto con el sol perdiéndose en el mar.
Al sur del Tajo hay extensos arenales, más de 30 kilómetros de arena y mar, a escasos 30 minutos de viaje de Lisboa, son una tentación que invitan a explorar: como la afamada Costa de Caparica, la Arrábida y la Península de Troya. También se puede sentir el mar y toda su naturaleza aún más cerca, haciendo nudismo en Meco o nadando con los delfines cerca de Setúbal. Pareciera imposible imaginar todo esto en pleno invierno, pero afortunadamente el verano siempre llega.
Visitar Lisboa
Lisboa es una ciudad repleta de atractivos con construcciones históricas y moderna arquitectura, locales donde suena el romántico ritmo de fado, discotecas a orillas del río, estratégicos miradores para admirar los tejados rojos del Barrio Pessoa, sus plazas y en el fondo el Tajo y los puentes.
Lisboa es también una ciudad moderna y cosmopolita donde hacer compras es una peligrosa tentación. Modernos centros comerciales, oferta internacional, elegante y muy variada se encuentra recorriendo la Avenida de la Libertad, la Baixa y el Chiado.
Afortunadamente hace méritos y tiene todo para seguir siendo considerada la Capital del Mar. Entre sabrosos platos de sardina asada, pescaditos de la huerta o un suculento bife à Marrare, acompañado de una copa de buen vino de Oporto o Madeira, podemos ir proyectando un interesante recorrido por las magníficas playas que estas costas nos proponen.
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